Jaime Gallego durante el partido | Foto: Saúl Ceballos
El BM Torrelavega sufrió hasta el final para doblegar a un correoso Ikasa BM Madrid Boadilla. A pesar de las ausencias de Cangiani, Casanova e Isi Martínez, el conjunto cántabro logro imponerse a los madrileños en el último compromiso liguero de 2020. La victoria, sexta consecutiva de los naranjas, supone irse de vacaciones después de once jornadas sin conocer la derrota y 441 días sin perder en casa.
El partido comenzó con las dos escuadras tratando de correr todo lo posible. Un lanzamiento de cadera de Dani Serrano se convertía en el empate a tres tras un inicio frenético. Los pupilos de Javier Martín tenían un punto más de agresividad que el BM Torrelavega y no tardaron en demostrar que no habían venido a Torrelavega de paseo. Con una defensa 5:1 y un Adriá Cumplido muy móvil en la faceta atacante, los madrileños lograron un parcial de 0-3 que provocó el tiempo muerto de Mozas.
El toque de atención del técnico local fue suficiente para rearmar la defensa cántabra. Moreno y Gallego se convirtieron en una muralla que propició la recuperación local. Tras un gol al largo de David García, una mano meritoria de Krimer habilitó un contragolpe que Nico Colunga convirtió en el 5 – 6. El BM Torrelavega había regresado al partido. Más aún cuando el argentino detuvo un penalti a Adriá Cumplido.
Sin embargo, BM Madrid Boadilla no se dejó amilanar y mantuvo el tipo. Con un ritmo de juego elevadísimo, los jóvenes jugadores visitantes resistían las acometidas locales y se mantenían por delante en el electrónico. Jaime Fernández mandó a las mallas un penalti que supuso además la exclusión de Lombilla. Con uno más sobre el parqué, los foráneos consolidaron una renta de dos gracias al acierto de Nacho Salgado.
Restablecida la igualdad y con Marc Abalos en el centro de la zaga, el BM Torrelavega se lanzó a tumba abierta a por su adversario. José Carlos Hernández aprovechó un magnífico pase al extremo de Genio González para hacer el 11 – 12. Los naranjas necesitaban encadenar dos aciertos consecutivos para hacerse con el mando del choque, pero los lanzadores locales no terminaban de estar finos ante un acertadísimo Pablo Prado. A falta de tres minutos para el descanso, un par de acciones defensivas de mérito de Lombilla bien acompañadas por un gol de super clase de José Carlos Hernández y dos penaltis transformados por Alonso Moreno devolvían la iniciativa en el marcador a los naranjas después de 26 minutos a rebufo.
La segunda mitad prometía emociones fuertes y así fue desde el principio. La defensa abierta del BM Madrid Boadilla causaba muchas dificultades a la ofensiva naranja. A todos, menos a un José Carlos Hernández capaz de ver huecos imposibles. El extremo convirtió el balonmano en arte para igualar el tanteo a 15.
Pese a ello, los cántabros no eran el equipo que maniató consecutivamente a BM Alcobendas y a BM Antequera. La defensa no producía tanto como en tardes anteriores y el BM Torrelavega corría menos de lo que le gustaría. Cumplido lanzó un misil directo al arco de Araujo que suponía el 17 – 19. El lateral derecho de BM Madrid era una auténtica pesadilla para los cántabros. En la acción posterior, se inventó un pase de tiralíneas para que Puerta marcase a placer.
Cuando los árbitros excluyeron a Santiago Echevarría, los cántabros se hicieron con dos pelotas consecutivas que bastaron para igualar la contienda. Lombilla establecía las tablas a 20 entrando hasta seis metros entre uno y dos. Sin embargo, en la acción siguiente, Gallego fue sancionado con dos minutos BM Madrid volvió a adueñarse del partido.
El tiempo muerto de Mozas devolvió a Krimer al arco local y dibujó una jugada de pizarra que terminó en un lanzamiento de siete metros transformado por Moreno. Con 21 – 22 y un cuarto de hora por delante, los cántabros pasaron a defender 5:1 con Serrano como avanzado. El cambio desembocó en dos robos consecutivos y un tanto de David García. El tiempo muerto de Martín no se hizo esperar.
El partido entró en su fase definitiva con una exclusión de Manuel Holst y una nueva diana de David García desde la esquina. El BM Torrelavega recuperó la bola y Prieto, recién regresado al choque, batió a Prado por el corto. Con el avanzado, ni Cumplido ni Salgado se movían con tanta facilidad y eso lo acusó un BM Madrid al que comenzaba a costarle un poco más anotar. Una recuperación de la zaga local la convirtió Prieto en el 25 – 24 y la exclusión de Olivares. Los de Mozas aprovecharon la circunstancia y gracias a un inspirado David García lograron situarse dos por delante por primera vez en el encuentro.
El tiempo muerto de Martín reconectó a los suyos que equilibraron las fuerzas al provocar la exclusión de Prieto. Sin embargo, en el penalti que podía devolverles al choque, Krimer sacó una rodilla de oro. Con 26 – 24 y pelota para atacar, los naranjas circularon hasta la esquina derecha de su ataque. Allí esperaba un entonado García para marcar su sexto tanto de la tarde. Medio partido dos acciones.
Tres tanto de renta a falta de tres minutos por jugar fueron botín más que suficiente para que el BM Torrelavega mantuviese una jornada más la imbatibilidad de un Vicente Trueba en el que acumula 441 días sin perder.
BM Torrelavega. Murillo Araújo, Marco Krimer; Marc Abalos (1), Antón Setién, Alonso Moreno (4), Sergio Crespo (2), Jorge Prieto (3), Jaime Gallego (1), Borja Lombilla
(3), Dani Serrano (2), José Carlos Hernández (6), Dani Hernández, Victor Serna, David García (6) y Nico Colunga (2).
BM Madrid Boadilla. Guillem Herms, Pablo Prado; Adriá Cumplido (6), Marcos Aguilella (3), Joaquín Olivares, Manuel Holst, Javier Holst (6), Manuel Feijoo, Miguel Aday Pérez Chirinos, Ignacio Salgado (6), David Medina, Santiago Echevarría (2), Jaime Fernández (3) y Mario Rodríguez.
3 – 4, 4 – 6, 6 – 8, 9 – 11, 11 – 12, 14 – 14.
16 – 17, 19 – 20, 20 – 22, 22 – 23, 25 – 24, 30 – 27
Árbitros: Francisco Fernández y Adrián Rodríguez (C.A. Principado de Asturias)